19 mar 2006

Breve Glosario para el Tratado de Ateología de Michel Onfray

Experimentada Teófila,
Sé que Vd., al contar con la experiencia que brindan los años, puede creer demasiado simples algunas de mis preocupaciones. Ocurre que durante mi lectura del herético "Tratado de Ateología" del no menos hereje Michel Onfray, se han abierto varias líneas de trabajo, lo cual aunque siempre positivo me obliga a tomar algún orden en mis apreciaciones. De esa manera, he decidido comenzar haciendo un breve glosario de las palabras de las cuales me interesaba saber algo más, sin tampoco necesitar un completo estudio de cada una. Estas son:

  • Deista-Deismo: que son los que de defendían la existencia de dios como principio de la realidad, pero despojado de los atributos con que le había revestido el cristianismo: providente, creador, personal, etc.
  • Gnosticismo: Onfray cita por ejemplo la destrucción de templos gnosticos. Es una serie de creencias bastante heterodoxas que crecieron mucho hasta el siglo III cuando la Iglesia bajó línea y "puso orden" en tanta libre explicación del fenómeno cristiano. La palabra, del griego, viene de "conocimiento". El agnosticismo por su parte es mucho más moderno y es una especie de reacción científica a los que le daban a Dios una entidad científica.
  • Lo "performativo": el hecho de que las cosas existen por el hecho de decirlas, como el cura que declara casada a una pareja. Muy relacionado creería con lo de "In principio erat verbum" de Juan.
  • Ectoplasma: Lo usa Onfray irónicamente para referirse a Dios. Es una palabra que además de ser la parte exterior del citoplasma celular, es usada por los esotéricos como "materialización", o incluso "emanaciones" del mismo medium. Pueden adquirir autonomía y función.
  • Pleonasmo: Lo usa Onfray para introducir un concepto como "ateísmo ateo" Transcribo completa la definición de la RAE. "Figura de construcción, que consiste en emplear en la oración uno o más vocablos innecesarios para que tenga sentido completo, pero con los cuales se añade expresividad a lo dicho; p. ej., lo vi con mis propios ojos."2. m. Demasía o redundancia viciosa de palabras.

Luego le enviaré otras apreciaciones acerca de este interesante libro.
Suyo,

Teófilo.

4 comentarios:

Teofilo dijo...

Enigmática Teófila,
Como en tantas otras ocasiones desconozco absolutamente las intenciones de su epístola. Pero dado que se trasluce algún tipo de propuesta, confío desde ya en sus decisiones.
Perplejo la saluda,
Teófilo.

Teofilo dijo...

Dear Henry,
Celebro vuesos comentarios y los que vendrán espero. Gracias por la profundización sobre lo "performativo" y sobre todo la contrapartida con lo "constatativo". Como decía en mi epístola, Onfray usa este lenguaje en el sentido que predicas, como el ejemplo descripto a Teófila y que tu revisas sobre "la declaración de matrimonio". Pero también va más allá, hablando del "sentido performativo que crea al nombrar". De esta manera Jesús, y cito, "existe como la materialización de las aspiraciones proféticas de su época y de lo maravilloso propio de los autores antiguos", conforme al citado principio performativo.
No he podido incluir aún en el glosario otros términos por mí analizados en estos días: oximoron y el duo inmanencia-trascendencia.
Atentamente lo saluda,
Teófilo.

Anónimo dijo...

Estimado Teófilo,
Antes que nada, le pido que no me llame "dear", en todo caso,tal como hace Teófila, si lo desea, puede llamarme Monsieur Henry. Soy francés y como tal, soy muy afecto a las formalidades. Pasado este item propio del conocerse dos personas, me ocupo ya mismo de los planteos formulados en su carta.
Respecto de "performativo" le digo que no habiendo leído el texto objeto de su estudio, nada puedo opinar; por otra parte veo que le han sido útiles mis explicaciones sobre lo "performativo" en filosofia, por lo que me siento satisfecho, recompensado y conforme con ello.
Espero sus glosas de "oximoron" ("ah, el sol negro de Artaud" diría sin dudas nuestra querida Teófila)
y de "inmanencia-trascendencia".
Respetuosamente.
Henry Efwervren.

Anónimo dijo...

Estimado Teófilo,
Releo nuestras mutuas misivas y observo una imperdonable distracción mía. En una carta le pido que precise el uso de "performativo" en Onfray, en su carta usted precisa este uso... y luego... ¡yo le digo que nada puedo opinar puesto que no he leído el texto objeto de su estudio!. Pues entonces no le hubiera pedido nada antes.
En el acto me dispongo a reparar lo sucedido. Como usted bien sabe "performer" y todos sus derivados ofrecen sus dificultades al ser trasladados al español. De ahí la preferencia de muchos por utilizar el vocablo sin traducir "performer", "performance", y similares. Todo esto es así, y del mismo modo, las preferencias en traducciones han pasado por "ejecutar" y "actuar" (un actuar bien clásico de "poner en acto"; como cuando alguien dice "conocimiento en acto" para diferenciar de "conocimiento en potencia"). Ubicados en este universo de términos, es preciso establecer una distinción de primer orden:
* en el ejemplo del oficial público que une en matrimonio al pronunciar la fórmula "los declaro marido y mujer", las palabras instituyen, sin ellas no hay matrimonio, es cierto, y como decía Austin, no son ni verdaderas ni falsas, en todo caso, son felices o infelices.
* en el ejemplo de "Jesús como materialización de las aspiraciones de su época” no sucede nada del orden performativo al menos en la precisión austiniana; lo que estaría describiendo Onfray –según la información que me transmite usted Teófilo- es el proceso por el cual se crea una figura mítica, heroica, un martir, un padre al cual rendir culto, etc: como toda fábula.
En conclusión, sigo advirtiendo que tengo mis razones para decir que nada puedo opinar al no haber leído el texo de Onfray.
Respetuosamente.
Henry Efwervren.